ApostasÃa Colectiva 2009. Resumen
Desde diciembre del año pasado un grupo de personas venimos trabajando en un proyecto cuya primer etapa terminó el lunes último cuando se presentó en la Arquidiócesis de Buenos Aires el reclamo de 1116 bautizados pidiendo que sus datos sean borrados de los registros de la Iglesia Católica en la que figuran como bautizados y por lo tanto como miembros.
La iniciativa, que originalmente surgió de un grupo de RIMA (Red de Información de Mujeres de Argentina) pero que rápidamente generó interés y adhesion de diversas militancias, entre ellas del ateÃsmo, fue coordinada desde una lista principal de Google Groups a partir de la cual se generaron listas de trabajo mas regionales para adaptar la iniciativa a las necesidades de cada ciudad, pero manteniendo la misma filosofÃa de la lista general. El punto de contacto con los interesados en la propuesta fue la página del proyecto (apostasiacolectiva.org) en la cual pueden leerse los argumentos de la convocatoria, pueden encontrarse cartas modelo para apostatar, y hasta existe la posibilidad de llenar un formulario que genera la carta lista para enviar a la diócesis correspondiente y asà iniciar el trámite formal de baja a la vez que sirve para adherir con sus datos a la presentación colectiva.
En este punto hay que decir que la convocatoria colectiva es simbólica, que pretende ser un rechazo a las polÃticas de la iglesia en cuanto a cuestiones como moral, sexualidad, educación, salud, al presupuesto que el estado le destina y a la relación confusa que ambos mantienen. El pedido formal de baja de los registros de la institución católica se deberá hacer siempre de manera individual pudiendo utilizarse la carta generada en la página de apostasiacolectiva.org
Una vez terminada la primera etapa de la convocatoria y a tÃtulo personal, me gustarÃa aprovechar este espacio para dejar algunas reflexiones.
En primer lugar manifestar el orgullo y la satisfacción por el trabajo realizado. Dentro de los pocos comentarios que hicieron a los medios los representantes de la iglesia (ACI Prensa y CrÃtica Digital) y sobre todo dentro de los muchos insultos que se recibieron en la página web de la convocatoria, aparecÃan dudas respecto a quién estaba detrás de la organización de la convocatoria (argumentando que estaba inteligentemente armada) o a los recursos económicos que implicarÃa (según ellos) generar el debate que se alcanzó. La respuesta es: solo habÃa un grupo de personas, muchas de las cuales no nos conocÃamos antes de diciembre del año pasado, sin sostenimiento económico ni de ningún otro tipo de ninguna organización, ni grupo ni mucho menos del estado. Los volantes, la pagina web, el contacto con los medios, el tiempo invertido, fueron todos humildes aportes de cada uno de los integrantes de la convocatoria. Detrás de eso no hubo nada.
Lo segundo es hacer público el agradecimiento a todos los que participaron por la dedicación y el compromiso. Fueron dÃas intensos y movilizantes que dejan una experiencia inolvidable para los que como yo no habÃan participando nunca en la organización de algo a este nivel.
También me gustarÃa hacer algunas reflexiones sobre lo que parece ser la pregunta obligada a esta altura: El balance final de la convocatoria. Es un tema claramente subjetivo que depende fundamentalmente de los objetivos y las expectativas iniciales. Aquà hay que resaltar que lo que menos se esperaba era número, dado que se apuntaba más a promover un debate y dar a conocer la posibilidad y las razones que entendemos que justifican pedir la baja de la institución católica. Si el trabajo es bueno, y si logramos generar ese debate, creemos que las razones que exponemos a la larga van a generar un buen número de adherentes, pero esto no es una tarea que se logre ni en un mes ni mucho menos en cuatro notas en los diarios. Aún asÃ, y dados los escasos medios con los que pudimos dar a conocer la campaña (sin publicidad paga por ejemplo) puedo decir que personalmente estoy muy satisfecho no solo con la repercusión de la convocatoria, con el eco que obtuvo en la sociedad, sino también con el número final de adherentes. Aún cuando no se pueda plantear en términos de plesbiscito, y teniendo en cuenta la abismal diferencia entre el brutal aparato publicitario que dispone la Iglesia Católica (con noticias diarias en los medios de difusión, con canales de TV, radios, medios gráficos, etc dedicados exclusivamente a la difusión de los intereses de la Iglesia) frente a nuestra humilde página web y algunas pocas notas aisladas en algunos pocos medios de difusión, entendemos que se pudo mostrar un enfoque distinto y generar cierto nivel de debate respecto a la relación de la gente con la Iglesia.
Nobleza obliga, me gustarÃa remarcar algunos puntos que valoro como positivos respecto a la relación de creyentes con la convocatoria. Primero, reconocer el valor y la honestidad de grupos cristianos que han sabido separar su religiosidad y su fe de las polÃticas de la Iglesia Católica y han decidido adherir a la convocatoria, aún bajo las amenazas de condenación que la Iglesia enseña, y sin por eso renunciar a su legÃtimas ideas religiosas. Y segundo, asà como en la página web de la convocatoria se mencionan los insultos de los inquisidores de siempre también hay que mencionar quienes sin compartir los objetivos de la convocatoria se ocuparon en informarse con las fuentes buscando un contacto con quienes la coordinábamos.
Muchas son las cosas que aprendimos, las historias que conocimos, la experiencia que hicimos. Iré compartiendo todo lo que pueda en futuras entradas en esta web, además de los balances que vayamos haciendo como grupo en la web de la convocatoria. Aún queda por resolver algunas propuestas que fueron apareciendo, particularmente sobre temas de laicismo, separación de la Iglesia del Estado y porque no la organización de una nueva convocatoria de apostasÃa colectiva para el año que viene. Mientras tanto, y para finalizar por ahora, simplemente manifestar mi orgullo personal por el objetivo cumplido. Gracias a todos.
La iniciativa, que originalmente surgió de un grupo de RIMA (Red de Información de Mujeres de Argentina) pero que rápidamente generó interés y adhesion de diversas militancias, entre ellas del ateÃsmo, fue coordinada desde una lista principal de Google Groups a partir de la cual se generaron listas de trabajo mas regionales para adaptar la iniciativa a las necesidades de cada ciudad, pero manteniendo la misma filosofÃa de la lista general. El punto de contacto con los interesados en la propuesta fue la página del proyecto (apostasiacolectiva.org) en la cual pueden leerse los argumentos de la convocatoria, pueden encontrarse cartas modelo para apostatar, y hasta existe la posibilidad de llenar un formulario que genera la carta lista para enviar a la diócesis correspondiente y asà iniciar el trámite formal de baja a la vez que sirve para adherir con sus datos a la presentación colectiva.
En este punto hay que decir que la convocatoria colectiva es simbólica, que pretende ser un rechazo a las polÃticas de la iglesia en cuanto a cuestiones como moral, sexualidad, educación, salud, al presupuesto que el estado le destina y a la relación confusa que ambos mantienen. El pedido formal de baja de los registros de la institución católica se deberá hacer siempre de manera individual pudiendo utilizarse la carta generada en la página de apostasiacolectiva.org
Una vez terminada la primera etapa de la convocatoria y a tÃtulo personal, me gustarÃa aprovechar este espacio para dejar algunas reflexiones.
En primer lugar manifestar el orgullo y la satisfacción por el trabajo realizado. Dentro de los pocos comentarios que hicieron a los medios los representantes de la iglesia (ACI Prensa y CrÃtica Digital) y sobre todo dentro de los muchos insultos que se recibieron en la página web de la convocatoria, aparecÃan dudas respecto a quién estaba detrás de la organización de la convocatoria (argumentando que estaba inteligentemente armada) o a los recursos económicos que implicarÃa (según ellos) generar el debate que se alcanzó. La respuesta es: solo habÃa un grupo de personas, muchas de las cuales no nos conocÃamos antes de diciembre del año pasado, sin sostenimiento económico ni de ningún otro tipo de ninguna organización, ni grupo ni mucho menos del estado. Los volantes, la pagina web, el contacto con los medios, el tiempo invertido, fueron todos humildes aportes de cada uno de los integrantes de la convocatoria. Detrás de eso no hubo nada.
Lo segundo es hacer público el agradecimiento a todos los que participaron por la dedicación y el compromiso. Fueron dÃas intensos y movilizantes que dejan una experiencia inolvidable para los que como yo no habÃan participando nunca en la organización de algo a este nivel.
También me gustarÃa hacer algunas reflexiones sobre lo que parece ser la pregunta obligada a esta altura: El balance final de la convocatoria. Es un tema claramente subjetivo que depende fundamentalmente de los objetivos y las expectativas iniciales. Aquà hay que resaltar que lo que menos se esperaba era número, dado que se apuntaba más a promover un debate y dar a conocer la posibilidad y las razones que entendemos que justifican pedir la baja de la institución católica. Si el trabajo es bueno, y si logramos generar ese debate, creemos que las razones que exponemos a la larga van a generar un buen número de adherentes, pero esto no es una tarea que se logre ni en un mes ni mucho menos en cuatro notas en los diarios. Aún asÃ, y dados los escasos medios con los que pudimos dar a conocer la campaña (sin publicidad paga por ejemplo) puedo decir que personalmente estoy muy satisfecho no solo con la repercusión de la convocatoria, con el eco que obtuvo en la sociedad, sino también con el número final de adherentes. Aún cuando no se pueda plantear en términos de plesbiscito, y teniendo en cuenta la abismal diferencia entre el brutal aparato publicitario que dispone la Iglesia Católica (con noticias diarias en los medios de difusión, con canales de TV, radios, medios gráficos, etc dedicados exclusivamente a la difusión de los intereses de la Iglesia) frente a nuestra humilde página web y algunas pocas notas aisladas en algunos pocos medios de difusión, entendemos que se pudo mostrar un enfoque distinto y generar cierto nivel de debate respecto a la relación de la gente con la Iglesia.
Nobleza obliga, me gustarÃa remarcar algunos puntos que valoro como positivos respecto a la relación de creyentes con la convocatoria. Primero, reconocer el valor y la honestidad de grupos cristianos que han sabido separar su religiosidad y su fe de las polÃticas de la Iglesia Católica y han decidido adherir a la convocatoria, aún bajo las amenazas de condenación que la Iglesia enseña, y sin por eso renunciar a su legÃtimas ideas religiosas. Y segundo, asà como en la página web de la convocatoria se mencionan los insultos de los inquisidores de siempre también hay que mencionar quienes sin compartir los objetivos de la convocatoria se ocuparon en informarse con las fuentes buscando un contacto con quienes la coordinábamos.
Muchas son las cosas que aprendimos, las historias que conocimos, la experiencia que hicimos. Iré compartiendo todo lo que pueda en futuras entradas en esta web, además de los balances que vayamos haciendo como grupo en la web de la convocatoria. Aún queda por resolver algunas propuestas que fueron apareciendo, particularmente sobre temas de laicismo, separación de la Iglesia del Estado y porque no la organización de una nueva convocatoria de apostasÃa colectiva para el año que viene. Mientras tanto, y para finalizar por ahora, simplemente manifestar mi orgullo personal por el objetivo cumplido. Gracias a todos.