Las primeras horas de una vida



Por primera vez es posible visualizar la actividad durante las primeras 24 horas de vida de un embrión a nivel celular.

Con un nuevo microscopio recientemente desarrollado que utiliza una hoja de luz para representar un organismo viviente desde distintas dimensiones, los científicos han sido capazes de demostrar la compleja organización celular de un embrión de pez cebra mientras crece desde ser una simple célula hasta un organismo de 25.000 células.

«Imagínese a todos los habitantes de una ciudad utilizando cada uno durante un día entero un telescopio para ver el espacio» dijo Philipp Keller, del Laboratorio Europeo de Biología Molecular de Heidelberg, en Alemania, en una nota de prensa. «Esto se parece mucho a ser capaz de seguir cada una de las 10.000 células que forman un embrión de vertebrado».

Los embriones del pez cebra crecen mucho más rápido que los humanos, los cuales tras tres días sólo están formados por ocho células.

Antes, los científicos sólo habían sido capaces de realizar montajes con las primeras horas de un par de organismos invertebrados con sólo cientos de células, como el gusano nemátodo —un trabajo que obtuvo el Premio Nobel—. Hacer lo mismo con un vertebrado hasta ahora era esencialmente imposible.

El montaje de imágenes tridimensionales tomadas a intervalos de 10 minutos muestran células dividiéndose y moviéndose alrededor del embrión para formar tejidos especializados desde dos ángulos diferentes. Este nuevo desarrollo ha sido publicado recientemente en Science.

«Nuestro embrión digital es el Google Earch de la investigación embriónica» dijo en una nota Jochen Wittbrodt de la Universidad de Heidelberg. «Nos da un vistazo de todo lo que ocurre en las primeras 24 horas, permitiéndote hacer zoom hacia todos los detalles celulares y subcelulares».

La nueva técnica recibe el nombre de Digital Scanned Laser Light-Sheet Fluorescence Microscopy, y podría ser utilizada en animales como ratones, pollos, o ranas, lo que permitirá a los investigadores entender mejor la evolución a escala celular.



La investigación desde luego demuestra que los primeros pasos del desarrollo del corazón no ocurren como los científicos pensaban.

Visto en Wired Science.

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