El tiempo pasa más deprisa en el piso de arriba
José Antonio López
Todos hemos escuchado alguna vez aquello de que cuanto más rápido viajamos, más lento pasa el tiempo. Sin embargo, algo menos conocido pero que ya habÃa sido ampliamente descrito por Albert Einstein en su teorÃa de la relatividad, es el hecho de que, probablemente y sin saberlo, su vecino del piso de arriba envejece más rápido que usted. Como lo oye.
Según acaban de publicar investigadores del Instituto Nacional de Estándares y TecnologÃa —NIST, en inglés— en la revisa Science, una modificación en altura tan ridÃcula como unos pocos centÃmetros es suficiente para hacer que, a la larga, dos de los relojes atómicos más precisos del mundo -y de la historia- den mediciones distintas.
Los relojes, basados en las vibraciones, en torno al trillón de veces por segundo, entre dos niveles de energÃa de un único ión de aluminio se situaron a unos escasos 33 centÃmetros uno con respecto al otro y, tal y como Einstein predijo, a mayor altura, la gravedad ejerce una menor influencia y, por ello, el tiempo transcurre más deprisa.
Obviamente, las diferencias son solo medibles con los mejores instrumentos de medición del tiempo del mundo.
En resumen, y volviendo a la paradoja tan socorrida de los dos gemelos, el hermano que viviera en un escalón superior añadirÃa a su vida unas millonésimas de segundo cada 80 años. No es mucho, pero es fÃsica al fin y al cabo.
Otra pregunta es, cuando las diferencias son tan extremadamente pequeñas a la escala humana, ¿para qué sirve esta información?
Los cientÃficos sostienen que estudios en geodesia —representación de la forma de la Tierra— y posibles futuras aplicaciones en geofÃsica o hidrologÃa podrÃan sacar provecho del poder de detección de estos procesos fÃsicos. Eso, y la posibilidad de construir los relojes más exactos de la historia.
Visto en RTVE.es. Entre Probetas es el fantástico podcast cientÃfico de José Antonio López para Radio 5.
Todos hemos escuchado alguna vez aquello de que cuanto más rápido viajamos, más lento pasa el tiempo. Sin embargo, algo menos conocido pero que ya habÃa sido ampliamente descrito por Albert Einstein en su teorÃa de la relatividad, es el hecho de que, probablemente y sin saberlo, su vecino del piso de arriba envejece más rápido que usted. Como lo oye.
Según acaban de publicar investigadores del Instituto Nacional de Estándares y TecnologÃa —NIST, en inglés— en la revisa Science, una modificación en altura tan ridÃcula como unos pocos centÃmetros es suficiente para hacer que, a la larga, dos de los relojes atómicos más precisos del mundo -y de la historia- den mediciones distintas.
Los relojes, basados en las vibraciones, en torno al trillón de veces por segundo, entre dos niveles de energÃa de un único ión de aluminio se situaron a unos escasos 33 centÃmetros uno con respecto al otro y, tal y como Einstein predijo, a mayor altura, la gravedad ejerce una menor influencia y, por ello, el tiempo transcurre más deprisa.
Obviamente, las diferencias son solo medibles con los mejores instrumentos de medición del tiempo del mundo.
En resumen, y volviendo a la paradoja tan socorrida de los dos gemelos, el hermano que viviera en un escalón superior añadirÃa a su vida unas millonésimas de segundo cada 80 años. No es mucho, pero es fÃsica al fin y al cabo.
Otra pregunta es, cuando las diferencias son tan extremadamente pequeñas a la escala humana, ¿para qué sirve esta información?
Los cientÃficos sostienen que estudios en geodesia —representación de la forma de la Tierra— y posibles futuras aplicaciones en geofÃsica o hidrologÃa podrÃan sacar provecho del poder de detección de estos procesos fÃsicos. Eso, y la posibilidad de construir los relojes más exactos de la historia.
Visto en RTVE.es. Entre Probetas es el fantástico podcast cientÃfico de José Antonio López para Radio 5.