Viernes Santo: ¡a comer pescado!

Hoy Viernes Santo, millones de católicos en todo el mundo recordaron la muerte de Jesús, hace unos dos mil años, haciendo el gran sacrificio de comer pescado.

Jesús era un Judío (circuncidado y medianamente observante al comienzo) que proclamó que era hijo de Dios y rey de los Judíos. Por proclamarse hijo de Dios, la cúpula religiosa de los Judíos lo acusó de blasfemo; por proclamarse rey de los Judíos, la cúpula militar de la ocupación romana lo acusó de sedición. El punto es que terminó colgado y clavado junto con un grupo de criminales que fueron sentenciados ese mismo día, no sin antes recibir 40 azotes y cargar, al igual que los demás criminales, con su cruz hasta el lugar de la ejecución.

Jesús era seguido por un grupo, el cual después de su muerte partió en todas direcciones para escapar de la persecución, en algunos casos, y en otros casos para predicar y crear una nueva religión. Simón, que fue llamado "Pedro" por Jesús, llegó a Roma y fundó básicamente la institución de la iglesia, siendo el primer "Papa", en términos técnicos. Fue muchas veces arrojado en prisión y finalmente muerto bajo el mandato del emperador Nerón.

"Pablo", otro discípulo, era cinco años menor que Jesús y jamás llegó a conocerlo; su importancia radica en que fue un activista muy importante y ayudó a ordenar y propagar el cristianismo. Noten, de nuevo, que el cristianismo era una religión escindida del Judaísmo, así que no era nada trivial expandirla. Pablo también llegó a Roma y también fue muerto bajo el mandato de Nerón al igual que "Pedro".

En el lugar donde estaba sepultado Pedro se construyó el Vaticano más o menos en el año 1500. Noten sin embargo que los restos físicos de Pedro se encontraron en el 1940 aproximadamente, después de unas excavaciones ordenadas por el Papa de la época. El cristianismo ganó fuerza en Europa con el tiempo y su gran salto fue sin lugar a dudas el hecho de que una gran parte del mundo que todavía vivía en una época pre-civilización, fue invadida por el ejército de España. Aprovechando esta invasión, muchos sacerdotes católicos viajaron a América para promover el cristianismo como reemplazo a las religiones originarias. La tarea al parecer fue mucho más fácil que convertir musulmanes o judíos, porque básicamente toda América del Sur es hasta el día un lugar en que la mayoría se declara católico.

El poder de la iglesia católica es hoy día menor que en el siglo pasado pero aún importante. En términos económicos, unos 250 millones de dólares anuales de ingresos principalmente por concepto de donaciones van directamente al Vaticano, pero obviamente hay mucha más circulación de dinero que no va derecho al Vaticano. Además la iglesia es dueña de numerosos bienes, principalmente tierras, obras de arte antiguas y edificios de gran valor, algunos de los cuales ha ido gradualmente cediendo a la administración secular para convertirse en museos, por ejemplo. La Iglesia Católica es lejos la ONG más grande del mundo.

Originalmente, los Judíos "ayunaban" los Martes y los Jueves. Este ayuno consistía en no comer carne roja; ella se consideraba un lujo y por lo tanto comían, en vez, pescado, que era mucho más accesible. El cristianismo cambió esto a los Miércoles y los Viernes, por llevar la contraria al judaísmo y también porque de acuerdo a la tradición un miércoles Jesús fue vendido y un Viernes fue ejecutado. Como nadie respetaba mucho el ayuno la iglesia decretó que al menos tenía que ser el Viernes.

La iglesia católica es bastante flexible con todo lo que no tenga que ver con el pene, la vagina, los pechos o el ano, así que lo que sus fieles se lleven al estómago no importa tanto. Otras religiones prohíben ciertas comidas (la carne de cerdo) o las bebidas alcohólicas, o indican que cada cierto tiempo la gente debe ir a la iglesia para considerarse miembro de la religión, etcétera, etcétera. A la iglesia, hoy, lo que le interesa es mantener un gran número y por eso se integra a la corriente de los tiempos, sin ceder por cierto en nada que tenga que ver con la genitalidad del sexo. Por eso finalmente se cambió de todos los viernes a un viernes al año.

Las religiones en occidente están perdiendo terreno año a año, y con el tiempo esta tradición de comer pescado el viernes santo seguirá perdiendo sentido. El viernes santo es la fiesta del pescado, simplemente, además de que en algunas radios tocan música suave y en la televisión transmiten películas de los 70s de la vida de Jesús.

Mucho se mantiene por "tradición" y estas tradiciones a veces tienen un cierto valor estético. Se mantienen las formas mientras el fondo se diluye rápidamente. Se siguen bautizando muchos niños con la correspondiente gran fiesta, pero después básicamente sus padres ni siquiera les enseñan a rezar. Las mujeres se casan de blanco a los 25 años después de haber iniciado su vida sexual hace mucho tiempo, con su esposo o con otro. Las personas aprovechan en semana santa de salir de paseo, o de preparar ricos platos a base de pescado y de aprovisionarse de una buena cantidad de chocolates para el día Domingo recibir a un conejo extra-bíblico y advenedizo.

Hoy la gente recibe mucho más educación que 2000 años atrás y tiene sus propias ideas. Muchos en el mundo, por ejemplo, creen en la reencarnación; yo me atrevería decir también que la mayoría de los Chilenos. Además las personas tienen sus propias ideas respecto a qué hacer y qué no, a si usar condón o no, a si comer pescado o no, a si ir a contar los pecados a otra persona, o no.

Por mi parte, creo que la iglesia tardará muchos años en reducirse a un mínimo operativo en términos prácticos. En términos intelectuales y espirituales, ya perdieron la batalla. El mundo está moviéndose en otra dirección y sus anacronismos son mirados con sorpresa por nosotros. La iglesia sigue condenando la homosexualidad, y por un misterioso motivo mientras nosotros consideramos que una mujer puede ser presidenta de un país, ellos consideran que una mujer no puede ser ni siquiera párroco de Cachiyuyo. La gente de la iglesia quisiera retraernos a un período de ignorancia en que recibíamos sus enseñanzas sin ninguna crítica, pero el pensamiento crítico, independiente, está empezando a estar firmemente establecido.

La humanidad es un niño que sale de la infancia. La religión es una mantita que lleva colgando en la mano, por si acaso le da pena. Pronto el niño guardará su mantita en un cajón y la conservará ahí por siempre como un recuerdo.


Fuentes: Wikipedia, La Biblia. Fuente imágen nazarenos en Sevilla: Saraphina. Publicado originalmente en Abril del 2006 en Manzana Mecánica.

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