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Matthias Sindelar (1903-1939) es considerado el mejor futbolista austriaco de todo el siglo XX, incluso se decía que era el mejor delantero centro del Mundo. No por casualidad le llamaban el "Mozart del fútbol". Y, a diferencia de los futbolistas que pastan hoy por nuestros campos de fútbol, Sindelar unía su habilidad con el balón a una fuerte militancia política por la libertad y contra el nazismo. Las aspiraciones imperialistas de los nazis se extendieron también al ámbito deportivo, y la anexión de Austria se convirtió a su vez en la anexión de la selección austriaca por la alemana. Sindelar se negó a formar parte de este nuevo equipo. Así, en el último partido de Austria como independiente, contra Alemania, Sindelar ejerció de capitán y marcó uno de los dos goles de su equipo (1938). Ambos fueron a celebrar sus goles mediante una danza frente al palco donde se encontraban las autoridades nazis. Esta osadía nunca fue perdonada a Sindelar, que sería perseguido por el nazismo hasta su muerte. Es de admirar la actitud de Matthias Sindelar, sobre todo hoy, cuando los futbolistas (salvo honrosas excepciones) no tiene más seso en sus cabezas que el balón que patean. Y esto cuando no vemos a jugadores como Di Canio en Italia, o Salva Ballesta en España, celebrando sus goles con saludos y gestos filofascistas. Os dejo un documental y un enlace a un artículo sobre este magnifico futbolista, cuya figura debería estar presente en cada campo de fútbol frente a la ostentación de símbolos neonazis y las actitudes racista de muchos jugadores e hinchadas.