Sacerdote boliviano, acusado de robo de arte sacro

El sacerdote fue detenido como sospechoso de tener relación con el robo de las joyas de la venerada imagen de la virgen del santuario boliviano de Copacabana


 15 Los ídolos de las naciones son plata y oro,
obra de manos de hombre.
16 Tienen boca, y no hablan;
tienen ojos, y no ven;
17 tienen oídos, y no oyen;
tampoco hay aliento en su boca.
18 Los que los hacen serán semejantes a ellos,
sí, todos los que en ellos confían.
19 Oh casa de Israel, bendecid al SEÑOR;
oh casa de Aarón, bendecid al SEÑOR;
20 oh casa de Leví, bendecid al SEÑOR;
los que teméis al SEÑOR, bendecid al SEÑOR.
21 Bendito desde Sion sea el SEN`OR,
quien mora en Jerusalén.
¡Aleluya!


SALMOS 135:15 SANTA IBLIA



LA PAZ | Martes 23 de julio de 2013 

Un jesuita boliviano fue detenido como sospechoso de tener relación con el robo de las joyas de la venerada imagen de la virgen del santuario boliviano de Copacabana, registrado en abril pasado, informó hoy la Policía.


La Fuerza Especial de Lucha contra el Crimen informó que el sacerdote, identificado por los medios como Jesús C.M., fue detenido el lunes tras declarar ante los fiscales y hoy fue trasladado al pueblo de Copacabana, en la frontera con Perú.


Está previsto que comparezca en las próximas horas ante un juez de medidas cautelares.

El fiscal Luis Ferrufino consideró sospechoso que el sacerdote cometiera contradicciones en su declaración sobre dónde estuvo un día antes y la noche en que se produjo el robo en Copacabana, el pasado 22 de abril.


El sacerdote durmió esa noche en un hotel de propiedad de una mujer, también sospechosa y detenida desde hace varias semanas en una cárcel de La Paz.


El santuario de Copacabana está situado a unos 160 kilómetros de La Paz, en la ribera del lago Titicaca, compartido con Perú, y es un centro de peregrinación para fieles de ambos países.


En honor a esta imagen religiosa, que es una de las más veneradas por los católicos de Bolivia, fue bautizada la famosa playa brasileña de Copacabana cuando en 1770 el obispo Antonio del Destierro inauguró en Río de Janeiro una capilla para que los pescadores pudieran venerar a esta Virgen.

La Virgen de Copacabana fue objeto de un robo de unas 28 joyas el pasado 22 de abril, tras una serie de hurtos similares en varios templos desprotegidos del área rural del país.


En mayo pasado, los numerosos fieles que participaban en una manifestación en La Paz domaron espontáneamente miles de pesos bolivianos para reponer las joyas.


 Fuente: http://www.eluniversal.com.mx/cultura/2013/bolivia-arte-sacro-jesuita-937876.html




 

Los comentarios han sido cerrados para esta nota