Los pastores del Presidente Uribe
En un estado laico el estado y las religiones no deben ir ligadas. El Estado no puede entrar a definir religiones o dogmas como verdaderos, a diferencia de personajes como Carlomagno (aquà comentado), que tomó partido en discusiones teológicas y las apoyó polÃticamente. Ni las iglesias pueden entrar a gobernar, o imponer su moral, o prohibir otro credo, como ocurre en los paÃses islamistas, por