Ironía

Visto en ateos.org y menéame.

Nunca se me habría ocurrido mejor frase para decirle, precisamente, a un nazareno. Ellos mismos se lo han buscado. La frase, que venía del lejano norte, iba a ser colocada en los autobuses. La presión que hicieron los cristianos para ver esos carteles fuera de los autobuses los ha colocado en un lugar más visible donde, sobre todo en estas fechas, cobra más importancia. Imagino a los penitentes, exhaustos a la mitad del paseo por llevar a cuestas un pesado ídolo de madera, levantar sus cabezas y preguntarse:

¿Pero por qué hago tantas gilipolleces en nombre de una religión sobre la que no tengo una sola prueba de que sea cierta?

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