HipocresÃa liberal en EEUU
El principal dogma del liberalismo es que la libertad individual está por encima de todo. Los crÃticos del liberalismo, por otra parte, pensamos que esa libertad se limita única y exclusivamente al mercado: libertad para explotar a otras personas y libertad para explotar el medio ambiente.
Pongamos como ejemplo la sexualidad, porque, ¿habrá algo más Ãntimo que el sexo? ¿No es acaso el sexo una de las práctica que más necesitan de esa "libertad individual"? En EEUU no lo ven nada claro. El puritanismo de esta sociedad choca y pasa por encima de ese dogma que pretenden imponer al resto del Mundo, haciendo gala asà de una hipocresÃa que, por otra parte, les ha caracterizado en otras cuestiones (recientemente han reconocido que, además de no haber armas de destrucción masiva en Iraq, Saddam no tenÃa ningún vinculo con Al-Qaeda).
Es asà pues que en varios Estados de los EEUU se aplican leyes que te prohÃben usar condones (en algunos Estados sólo los puedes adquirir a través del contrabando, caso de Wisconsin), practicar sexo anal o felaciones, besar los senos de tu pareja o incluso, como en Virginia, dormir desnudo.
De esta forma, no es de extrañar que el número de imputados por delitos sexuales se dispare en este paÃs.
En cualquier caso, estas polÃticas aplicadas por varios de los Estados que conforman EEUU no dejan de ser un ataque a las libertades individuales que ponen en duda los supuestos que defienden los liberales y más aún, los neoliberales que se miran en las polÃticas de EEUU. A pesar de sus prédicas, sus prácticas dejan claro que la libertad de los liberales es sólo libertad de empresa, libertad de mercado, en pocos casos libertad de las personas para desarrollar sus capacidades, su cultura y su sexualidad libremente.





























