El diseño pastafari

Las disputas, particularmente fuertes en EE.UU. sobre Evolución Vs. Creacionismo en las escuelas, no podría pasar desapercibidas a Su Tallarinesca Divinidad. Consciente de que se jugaban cuestiones de fondo, decidió hace pocos años aparecérsele a Bobby Henderson en un sueño, de manera de revelarle un conocimiento que, tanto la ciencia como seguidores de mitos varios, tratan de tapar: El universo tal como lo conocemos, y la vida en nuestro planeta, son la obra de Él, el Monstruo del Espaguetti Volador.

No vamos aquí a abordar un estudio exhaustivo de Su Fideeza, porque excedería nuestras humanas y por lo tanto limitadas posibilidades. Lo finito (el ser humano) no puede comprender lo infinito (El Monstruo del Espaguetti Volador, o Monesvol, entre los seguidores). Pero sí, vamos a hacer una breve introducción para aquellos que o bien tengan dudas, o bien se dejen llevar por superproducciones holliwoodenses que narran historias paganas sobre hijos de vírgenes y otras herejías.

Como decíamos, el Monesvol se manifestó a Bobby en un sueño, posiblemente luego de una indigestión inducida por el mismo Monesvol. Allí le comunicó alguna de las verdades que hoy son la base de la religión pastafari. Una de las principales es la que tiene que ver con la petición de que, si se va a enseñar “teorías” alternativas a la evolución en las escuelas, la teoría pastafari debería incluirse. Esta teoría enseña que todo, absolutamente todo lo que existe fue creado por Monesvol, y que las evidencias en contra fueron plantadas por él mismo para confundir. Por esto, cualquier estudio de datación va a mostrar que las cosas tienen más edad de la que realmente tienen, lo mismo que los fósiles en realidad son un montaje armado por Monesvol para poner a prueba nuestra fe. La magnitud de esta revelación fue comprendida por Henderson, que inmediatamente envió una carta abierta a la Junta Escolar de Kansas (traducción), de manera que junto con la propuesta de enseñar alternativas a la evolución, consideren la verdad que le fuera revelada.

El pastafarismo nos enseña que Su Espaguetosa Albondigosidad es un ser invisible e indetectable. Tiene un nombre propio, pero de tal belleza y perfección que el solo hecho de pronunciarlo termina no solo con la vida de quién lo hace, sino con todo ser a menos de 6,0534 kilómetros a la redonda, o el doble de distancia si el nombre es escrito o mecanografiado.

La verdad revelada a Bobby nos enseña también que el calentamiento global es la consecuencia del descenso de la cantidad de piratas, para lo que muestra un gráfico aportando evidencia al respecto.

Uno de los misterios de fe que rondan sobre la Suprema Persona de Monesvol es el que tiene que ver con su esencia cuatrinitaria. Monesvol es cuatro entidades en una persona. Chuck Norris, el Dr.House, Bob Esponja y Jack Bauer son, todos juntos y por separado, Monesvol. Esto permite a sus fieles la posibilidad de hacer pedidos a cada uno según convenga. Por ejemplo, cuestiones relaciadas con la seguridad, a Chuck Norris, favores varios a Bob Esponja (que suele ser el más accesible). Pedirle algo al Dr. House es perder el tiempo.

Si bien es invisible, la apariencia de Monesvol fue revelada en su momento, lo que ha propiciado que artistas de todo el mundo le rinda el debido culto. Desde pinturas hasta monumentos, la imagen de Monesvol se va haciendo cada vez más popular. Incluso pueden encontrarse verdaderos documentos mostrando al Supremo junto a su obra (Él, una montaña, un árbol y un enano… Monesvol no discrimina). Hasta una imagen de la última cena con Él

El pastafarismo, como era de esperar, tiene un código de conducta, que se apoya fundamentalmente en los ocho “Realmente preferiría que no” entregados por el Espaguettísimo al capitan Mosey. Su cumplimiento se ve recompenzado con una vida eterna en un paraiso con volcanes de cerveza y fábricas de strippers.. Sabemos que originalmente los mandamientos eran diez, pero dos fueron perdidos apenas fueron revelados. Los restantes ochos nos enseñan:

  1. Realmente preferiría que no actuases como un imbécil santurrón que se cree mejor que los demás cuando describas mi tallarinesca santidad. Si algunos no creen en mí, no pasa nada. En serio, no soy tan vanidoso. Además esto no es acerca de ellos así que no cambies de tema.
  2. Realmente preferiría que no usases mi existencia como un medio para oprimir, subyugar, castigar, eviscerar, o… ya sabes, ser malo con otros. Yo no requiero sacrificios, y la pureza es para el agua potable, no para la gente.
  3. Realmente preferiría que no juzgases a las personas por su aspecto, o cómo visten, o la manera en que hablan, o… mira, solo sé bueno, ¿vale? Ah, y que te entre en la cabeza: mujer = persona, hombre = persona, Samey = Samey. Ninguno es mejor que el otro, a menos que hablemos de moda claro, lo siento, pero eso se lo dejé a las mujeres y a algunos hombres que conocen la diferencia entre verde mar y fucsia.
  4. Realmente preferiría que no tuvieras una conducta que te ofenda a ti mismo, o a tu compañero amoroso mentalmente maduro y con edad legal para tomar sus propias decisiones. Respecto a cualquier otro que quiera objetar algo, creo que la expresión es “jódete”, a menos que lo encontreis ofensivo, en cuyo caso pueden apagar el televisor y salir a caminar, para variar.
  5. Realmente preferiría que no desafiaras las ideas fanáticas, misóginas, y de odio de otros con el estómago vacío. Come, luego ve tras los cabrones.
  6. Realmente preferiría que no construyeras iglesias/templos/mezquitas/santuarios multimillonarios a mi tallarinesca santidad cuando el dinero podría ser mejor gastado en (tú eliges):
    1. Terminar con la pobreza.
    2. Curar enfermedades.
    3. Vivir en paz, amar con pasión, y bajar el precio de la televisión por cable.
    Puedo ser un ser omnipresente de carbohidratos complejos, pero disfruto de las cosas sencillas de la vida. Yo lo sé, para eso SOY el creador.
  7. Realmente preferiría que no fueses por ahí contándole a la gente que te hablo. No eres tan interesante. Madura ya. Te dije que amaras a tu prójimo, ¿no entiendes las indirectas?
  8. Realmente preferiría que no le hicieses a los otros lo que te gustaría que te hiciesen a ti si te van las… eh… las cosas que usan mucho cuero/lubricante/Las Vegas. Si a la otra persona también le interesa (conforme a #4), entonces disfrutadlo, sacaos fotos, y por el amor de Mike ¡usad un PRESERVATIVO! En serio, es un pedazo de goma. Si no hubiera querido que disfrutarais al hacerlo habría añadido pinchos, o algo.

Sin bien el hecho de ser una verdad revelada por el mismísimo Monesvol debería eliminar toda duda, sabemos que siempre hay incrédulos y paganos que deciden continuar con sus cultos a falsas deidades. Los intelectuales pastafaris han elaborado una serie de argumentos fideológicos a fin de dejar claro, aún para los más incrédulos, la naturaleza divina de Su Fideeza. Los argumentos (tomados de Wikipedia) se detallan a continuación:

Argumento ontológico del MEV

Premisa 1: el Monstruo Volador de Espagueti es un ser que tiene toda perfección.
Premisa 2: la existencia es un atributo de la perfección.
Conclusión: por lo tanto el Monstruo Volador de Espaguetti existe.

El argumento cosmológico del MEV

Premisa 1: la existencia de todo lo que comienza a existir tiene una causa.
Premisa 2: el universo comenzó a existir.
Conclusión 1: por lo tanto la existencia del universo tiene una causa.

Premisa 3: como no hay una explicación científica que pueda elucidar la causa del origen del universo, esta causa debe ser sobrenatural, o sea el universo fue creado por una inteligencia superior a la que llamamos Monesvol.
Conclusión 2: por lo tanto, Monesvol existe (o no).

Premisa 4: los dioses siempre han creado a los humanos a su propia imagen y semejanza.
Premisa 5: el cerebro de los humanos (donde se aloja la inteligencia) parece una fuente de espaguetis.
Conclusión 3: por lo tanto, el Monstruo Volador de Espagueti (la Inteligencia Creadora) es el único Dios verdadero.

Argumento ontológico del ME

Premisa 1: se puede imaginar el ser más grande (del que no se pueda imaginar uno más grande).
Premisa 2: si no existe un ser a partir del cual no se puede imaginar uno más grande, de todos modos yo podría imaginar uno más grande que ese ser del cual no se podía imaginar uno más grande (o sea, un ser a partir del cual realmente ya no se pueda imaginar uno más grande).
Premisa 3: no es posible imaginar un ser más grande que un ser del cual ya no es posible imaginar uno más grande.
Conclusión 1: por lo tanto, existe un ser del que no se puede imaginar uno más grande.

Premisa 4: si ese ser no tiene un Apéndice Tallarinesco, entonces yo podría imaginar un ser más grande que ese ser: uno que tuviera un Apéndice Tallarinesco.
Conclusión 2: por lo tanto, el ser del que no se puede imaginar uno más grande tiene un Apéndice Tallarinesco.

Conclusión 3: por lo tanto, el ser del que no se puede imaginar uno más grande tiene un Apéndice Tallarinesco y existe
Conclusión 4: por lo tanto, el Monstruo Volador de Espagueti existe.
Conclusión 5: por lo tanto, el Monstruo Volador de Espagueti es todo poderoso. ¡Ramén!

Apariciones:

Pero el Monstruo del Espaguetti Volador no solo se vuelve evidente para los intelectuales que meditan sobre su innegable existencia, sino también para la gente de a pié. Existen noticias de apariciones de su Fideeza en la vida de muchos que no creían. Apariciones en nubes, humo, manchas de humedad y charcos de orina son reportados aquí y allá, pero la muestra más acabada de Monesvol fue la aparición de su bellísima imagen en una tostada y en un plato de comida.

monesvol

Ramén

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