Red de Blogs Ateos

Según publican algunos medios católicos, la Asociación Por la Vida (católica… ¿qué otra vida podría ser?), está pidiendo al Jefe de Gobierno porteño el veto de la ley que declara el 17 de mayo como el “Día de lucha contra la Discriminación por Orientación Sexual o Identidad de Género”. La petición, firmada por los abogados Andrés González Balcarce y Luis Daniel de Urquiza, argumenta que dicha ley atenta contra el matrimonio y la familia tal como ellos la conciben y por supuesto, tal como esperan que el resto la conciba.

Repiten una vez más que no es valioso ni legítimo, menos por ley imponer las prácticas homosexuales o lesbianas a niños y adolescentes como si sus reprimidos cerebros no pudieran comprender que nadie está pretendiendo imponer nada más que el derecho a no ser discriminados por una simple elección sexual. No se obliga a la gente a ser homosexual, sino que se pretende garantizar que los que decidan serlo no sean discriminados y tengan los mismos derechos que los heterosexuales.

Se quejan también del “gasto” que generan estos debates, como si nos sobrara el tiempo y los recursos del erario público, mientras la ciudad padece “agudos problemas” de inseguridad, educación y marginalidad. Claro que los abogados se quejan solo cuando el estado “derrocha” en cuestiones de derechos humanos, pero no ponen el grito en el cielo cuando el mismo estado “invierte” en sueldos de obispos, mantenimiento de la iglesia o subvenciones a colegios religiosos.

Manifestaciones anti-antidiscriminatorias de parte de movimientos católicos fundamentalistas no son nuevas ni en nuestro país ni en ningún otro, y parecen incluso esperables en personas que tienen por sagrado un libro con leyes bestiales y primitivas escrito hace aproximadamente 2 mil años. Lo que parecen no notar estos grupos, es que conviven en un pais con gente con una moral que ha evolucionado “un poco” desde aquellos tiempos primitivos, y que nos resistimos a una sociedad intolerante como la que pretenden perpetuar.

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