Católicos destruyen casas de evangélicos en Chiapas
sábado 16 de enero del 2010
IndÃgenas tzotziles desalojaron a los moradores. Apoyados con barretas, marros y serruchos consumaron la destrucción de las casas de madera
Católicos tradicionalistas destruyeron 13 viviendas de familias evangélicas de la comunidad Los Llanos de San Cristóbal de las Casas, denunció el dirigente religioso Esdras Alonso González.
Los tzotziles desalojaron a los moradores. Apoyados con barretas, marros y serruchos consumaron la destrucción de las casas de madera.
La agresión provocó el éxodo de 18 de los 30 evangélicos que habitan esa comunidad de los Altos de Chiapas.
Esdras Alonso, dirigente de la organización religiosa Alas de Ãguila, acusó como incitadores de la violencia a los dirigentes comunitarios Jesús Pérez, Manuel Pérez y al catequista Domingo DÃaz Teltuc.
El ataque a los evangélicos se añade a la acometida violenta de mayo pasado, cuando los tradicionalistas destruyeron el templo evangélico del lugar.
Alonso puntualizó que desde el año pasado los católicos mantenÃan bajo amenazas de expulsión y agresiones a la comunidad evangélica, como parte de la intolerancia religiosa que vive la región.
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IndÃgenas tzotziles desalojaron a los moradores. Apoyados con barretas, marros y serruchos consumaron la destrucción de las casas de madera
Católicos tradicionalistas destruyeron 13 viviendas de familias evangélicas de la comunidad Los Llanos de San Cristóbal de las Casas, denunció el dirigente religioso Esdras Alonso González.
Los tzotziles desalojaron a los moradores. Apoyados con barretas, marros y serruchos consumaron la destrucción de las casas de madera.
La agresión provocó el éxodo de 18 de los 30 evangélicos que habitan esa comunidad de los Altos de Chiapas.
Esdras Alonso, dirigente de la organización religiosa Alas de Ãguila, acusó como incitadores de la violencia a los dirigentes comunitarios Jesús Pérez, Manuel Pérez y al catequista Domingo DÃaz Teltuc.
El ataque a los evangélicos se añade a la acometida violenta de mayo pasado, cuando los tradicionalistas destruyeron el templo evangélico del lugar.
Alonso puntualizó que desde el año pasado los católicos mantenÃan bajo amenazas de expulsión y agresiones a la comunidad evangélica, como parte de la intolerancia religiosa que vive la región.
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