Red de Blogs Ateos

Habrá que felicitar a Rouco Varela por el porrillo de beatos que ha logrado meter en el calendario cristiano. 495 nuevas muescas relucen en el confesionario de tan insigne personaje. Una vez más, parece que aquel "sanbenito" de los inicios del siglo XX nos persigue: "España reserva espiritual de Occidente". Otros países exportan tecnología, industria, energía, etc. A juzgar por lo vivido estos días, España exporta beatos. Pero no vayan ustedes a pensar que cualquier clase de beatos pues, hasta en estas lides también hay distinciones. Sabiendo el personaje que impulsó las consabidas beatificaciones eran obvias las premisas que debían reunir los candidatos a poblar los altares. La opinión de la Conferencia Episcopal en la persona del Obispo de Jerez es, cuando menos, peculiar: "La beatificación de estos mártires nos lleva a la reconciliación, porque con sus vidas están predicando el perdón, el olvido, la entrega, la disculpa..." Creemos que el discurso de la Iglesia en este tema sigue siendo hueco y torticero. ¿Cómo se puede hablar de reconciliación cuando dentro del propio seno de la Iglesia Española han aparecido voces discordantes en la manera tan sectaria para elegir a estos beatos. ¿Cómo se puede hablar de reconciliación cuando, sibilinamente, se escogieron personajes ajusticiados por el bando republicano y se torció la cara a los pasados a cuchillo por el bando nacional?. ¿No es esto sectarismo? ¿ qué tipo de reconciliación nos quiere vender la Iglesia con este tipo de actuación?. Del mismo modo, la ICAR justifica sus actuaciones en la siguiente frase: "..Pero esto [la beatificación] llega después de un estudio concienzudo de cada uno de estos mártires, y después de mucho tiempo de investigación. La Iglesia no ha improvisado..." Es desconcertante que afirme tales cuestiones nada menos que el Presidente de la Comisión Episcopal para los medios de comunicación. "La iglesia ha estado mucho tiempo investigando" se atreve a decir. Sin embargo, hace pocos días salía una escalofriante noticia en el siguiente medio: http://www.20minutos.es/noticia/291892/0/benedicto/beatificacion/torturador/ Unas acusaciones gravísimas sobre torturas de uno de los ya ascendidos a los altares. Podría pensarse que esta controvertida información está difundida por elementos anticlericales para mayor enjundia de la Iglesia. Pues no señor, como se puede apreciar en el enlace, es la propia iglesia estadounidense quien denuncia estos escalofriantes hechos. ¿Qué ha investigado la Iglesia, entonces? ¿Cómo se les ha podido colar, después de "concienzudos estudios" un personaje acusado de torturas a un semejante? Si realmente se ha estudiado concienzudamente todos y cada uno de los casos, podríamos pensar que la ICAR es conocedora de los graves hechos que se le imputan a su beato y, sin embargo, han seguido adelante con el proceso. ¿Por qué? ¿Qué prisas había? ¿Sería acaso para hacerla coincidir con la aprobación de la Ley de Memoria Histórica? Ya son suficientemente comprometedoras las soterradas obstrucciones eclesiásticas a la justicia, en los casos de pedofília, como para que ahora la conciencia cristiana tenga que soportar las sospechas de haber elevado a los altares a un presunto torturador. Salúos.