A algunos católicos hay que decirles siempre que sí

Buscando información para el artículo anterior sobre la imposibilidad de publicar consignas ateas en los buses italianos para no despertar la extraordinaria susceptibilidad católica, me encuentro con un par de notas (mas una que ya no aparece online) interesantes a partir de la página Hazte Oír y sus links recomendados.
El primer artículo es la noticia de que los obispos españoles están preocupados por defender la libertad religiosa, como siempre entendiendo esta por la libertad expresar la fe en cualquier dios, pero no la libertad de expresar la falta de fe. Decir en vos alta "Dios probablemente no existe" es una ofensa para los católicos, pero afirmar "Dios efectivamente existe" es un mero ejercicio de la libertad de expresión que los ateos tenemos que tolerar abiertamente. Una forma de libertad bastante asimétrica, pero bien cristiana.
Los obispos escribieron una carta que dice cosas como "... los espacios públicos que deben ser utilizados de modo obligado por los ciudadanos no deben ser empleados para publicitar mensajes que ofenden las convicciones religiosas de muchos de ellos.". Claro que luego van y cuelgan crucifijos (lo que no es mas que una miniatura de un instrumento de ejecución que tranquilamente puede ofender a muchos de nosotros) en las escuelas públicas. La sensibilidad de los niños no cristianos no debe importar mucho y por eso se puede transformar una escuela pública en un instrumento de publicidad cristiana, pero no se puede utilizar un legítimo espacio de publicidad para decir nada que no sea también cristiano. Continúa afirmando que "Si se hace así, se lesiona el derecho al ejercicio libre de la religión, que debe ser posible sin que nadie se vea necesariamente menospreciado o atacado." como si una publicidad les impidiera ejercer su libertad religiosa.
Afirman más abajo que "Insinuar que Dios probablemente sea una invención de los creyentes y afirmar además que no les deja vivir en paz ni disfrutar de la vida, es objetivamente una blasfemia y una ofensa a los que creen.". Claro que ser ateo es afirmar justamente que Dios es una invención humana (particularmente de los creyentes en ese Dios) por lo que queda claro que para los obispos declararse ateo es "objetivamente" una blasfemia y una ofensa a los que creen. Afortunadamente vivimos en países donde aprendimos a diferenciar "delito" de "pecado", y la definición de blasfemia que cada religión se invente es un problema solo para los fieles a esa religión. Pero por las dudas, si no quieren herir a un católico, no se declaren ateos y síganle la corriente.

Finalmente me crucé con un blog que tienen una pintoresca pregunta al respecto de la campaña. La autora consulta "¿Se atreverían los ateos a sacar un autobús con esta leyenda? Alá no existe, Quítate el burka y disfruta la vida". La pregunta está exclusivamente dirigida a los ateos, aún cuando ella misma parece no creer en Alá. No queda claro si ella se animaría a sacar un autobús con esa leyenda, a pesar de estar en las mismas condiciones que un ateo para hacerlo. Otro punto interesante es la manera en la que los católicos se apoderan de la idea de Dios. El autobús no menciona a Jehová, ni a YHWH, ni a Eloim ni a ninguno de los otros nicknames del dios bíblico. El autobus dice "Dios", entendiendo por Dios a cualquiera de los dioses, y no solo a uno. Claro que para entender que Dios no es un invento exclusivo de los cristianos hay que tener una amplitud de mirada que no se le puede pedir a todo el mundo.
Me preguntaba: ¿Si la respuesta fuera "No, no nos animamos" entonces la existencia de Dios sería más probable?. Asumamos que los ateos fuéramos todos cobardes y tengamos miedo de arriesgar la única vida en la que creemos (un miedo no muy distinto al de los católicos que dicen creer que hay algo más pero que por las dudas lo evitan). ¿Cambia en algo el mensaje del texto, supone alguna contradicción para nuestro ateísmo o aporta algún argumento en favor de la existencia de algún dios?. La lógica que aprendí en el colegio me dice que una cosa no tiene nada que ver con la otra, y que lo que intenta esta señora es una simple chicana, bastante mal planteada por cierto. Pero en temas de lógica, me da la sensación que esta señora es inimputable.
No faltan afirmaciones del tipo "Están tratando de erradicar mis creencias de mi vida, de la educación que quiero dar a mis hijos" dado que para esta señora un bus ateo es un claro obstáculo para llevar adelante sus creencias, pero regar de crucifijos cuanto espacio vacío encuentren no debería parecer a los ateos un intento por imponernos sus creencias religiosas. Tampoco faltan generalizaciones, faltas de respeto, acusaciones personales, otras tantas afirmaciones cristianas de esas que les permiten la libertad religiosa y nos quieren limitar a nosotros por no pertenecer el privilegiado círculo católico.

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