¿Quién Quiere Qülo? III
Un culo divino
En ocasiones anteriores hemos celebrado el gran dÃa del culo con traseros femeninos. En atención a las parroquianas y parroquianos admiradores de los masculinos, y teniendo en cuenta que rendimos culto en cualquier momento del año a la belleza femenina en la sección «IdolatrÃa», vamos a ocuparnos en esta ocasión de las posaderas del sexo más culino de todos. Arrastrados por la ola innovadora, también vamos a abandonar el manga, para apreciar otro estilo gráfico; nada menos que el de Miguel Ãngel Buonarroti.
El capresani era un gran admirador de la anatomÃa másculina y sus rotundas formas ¿y qué forma más rotunda que la de un trasero? De manera que visita este motivo en diferentes «viñetas» de su Capilla Sixtina, como la de la imagen inferior, en la que se ofrecen unas nalgas abiertas de par en par, apenas veladas por la ropa, que deja adivinar incluso la sensible zona del nacimiento de los testÃculos y parte de éstos. Los pliegues del drapeado sugieren cierta tensión en la región anal. Por si todo esto no resulta suficientemente explÃcito, una gruesa serpiente rodea al personaje.
En ocasiones anteriores hemos celebrado el gran dÃa del culo con traseros femeninos. En atención a las parroquianas y parroquianos admiradores de los masculinos, y teniendo en cuenta que rendimos culto en cualquier momento del año a la belleza femenina en la sección «IdolatrÃa», vamos a ocuparnos en esta ocasión de las posaderas del sexo más culino de todos. Arrastrados por la ola innovadora, también vamos a abandonar el manga, para apreciar otro estilo gráfico; nada menos que el de Miguel Ãngel Buonarroti.
El capresani era un gran admirador de la anatomÃa másculina y sus rotundas formas ¿y qué forma más rotunda que la de un trasero? De manera que visita este motivo en diferentes «viñetas» de su Capilla Sixtina, como la de la imagen inferior, en la que se ofrecen unas nalgas abiertas de par en par, apenas veladas por la ropa, que deja adivinar incluso la sensible zona del nacimiento de los testÃculos y parte de éstos. Los pliegues del drapeado sugieren cierta tensión en la región anal. Por si todo esto no resulta suficientemente explÃcito, una gruesa serpiente rodea al personaje.
Pero dejemos a parte la orientación sexual del artista, sobre la que ya han escrito tantas plumas y pasemos a sus creencias filosóficas y religiosas. Miguel Ãngel participa del renacimiento de las ideas neoplatónicas del Cinquecento: su concepción del amor y de la belleza se inspiran del Symposio platónico, su idea de la inmortalidad del Fedro; todo ello a través de las teorÃas de Plotino, que ayudaban a conciliar todo esto con el cristianismo reinante, identificando Uno de aquel con el Dios de este.
Con estos datos a la vista, no tenemos más remedio que aceptar que el Culo por antonomasia, la Idea Suprema de las Posaderas, el Gran Trasero Ideal, serÃa el Pandero del Uno o el Pompis de Dios Padre. Ese gran culo de culos, principio y fin de todos los demás, fue representado por uno de los mayores artistas de la historia de este modo:
Con estos datos a la vista, no tenemos más remedio que aceptar que el Culo por antonomasia, la Idea Suprema de las Posaderas, el Gran Trasero Ideal, serÃa el Pandero del Uno o el Pompis de Dios Padre. Ese gran culo de culos, principio y fin de todos los demás, fue representado por uno de los mayores artistas de la historia de este modo:
Nota: Si bien la celebración se refiere a los culos en el cómic, defendemos la Capilla Sixtina como antecedente del noveno arte, ya que cumple con los rasgos principales de su definición: cuenta una historia gráficamente en una secuencia de imágenes más o menos limitadas en recuadros, que nos hemos tomado la libertad aquà de llamar «viñetas». También tiene otras caracterÃsticas no obligatorias, pero muy comunes en la historieta, como el asunto fantástico y el predominio del dibujo y la lÃnea sobre la mancha; si se fijan se trata más bien de dibujos coloreados que de pinturas, propiamente dichas.
Pueden ver las ediciones anteriores aquà y aquÃ. El Gran DÃa del culo comiquero es una iniciativa del Blog de Jotace.
El Jesús de la capitular es el ano de un perro, como pueden ver aquÃ. Gracias a nuestra querida parroquiana Malena por llamarnos la atención sobre él.