Nº 16: La necesidad de creer



La entrevista a George Coyne del post anterior me recordó mucho a una conversación que tuve hace meses con una amiga. Ella forma parte de un grupo cristiano (nada que ver con el Opus Dei o los Kikos), es un grupo mas bien alternativo, crítico con la jerarquía católica y con gran parte de su discurso. Esta a favor del uso de métodos anticonceptivos, a favor del matrimonio homosexual, del derecho al divorcio, de la ordenación de mujeres, de la investigación con células madre, etc... y por descontado no cree en Adan y Eva, en el diluvio universal, ni en la mayoría del Antiguo Testamento. Me llamaba tanto la atención que una chica como ella, con su formación y sus ideales, fuese creyente, que necesitaba saber en que basaba su fé. La conversación fue algo así:


Empecé preguntándole - ¿Sabes que tu fe cristiana se debe a que te has criado en un entorno cristiano?
- Sí, seguramente si hubiese nacido en Marruecos habría sido musulmana o en Tailandia habría sido budista.
- ¿Pero no son religiones con doctrinas diferentes?
- Eso se debe a que cada pueblo ha experimentado una parte de Dios y la ha interpretado de distinta manera. Es como varias personas que tocan una vaca con los ojos vendados, unos tocan los cuernos, otros el rabo, otros las patas - (creo que es el tipo de historias que les meten en ese grupo cristiano).
- En ese caso todos tendrían parte de razón y todos se equivocarían en parte ¿por qué habrías elegido ser cristiana y no musulmana o judía?
- Por Jesús.
- ¿Y como sabes como era Jesús?
- Por el Evangelio.
- ¿No sabes que los cuatro evangelios canónicos no son los únicos que existen y que el canon se decidió siglos después de la muerte de Jesús?. Además, como todo texto puede estar manipulado, exagerado, utilizado de modo propagandístico... - Para mi sorpresa ¡¡ella admite que sí!!
- No soy tonta, ya se que la biblia la han escrito personas y que esta manipulada y que son personas las que han elegido que poner y que no, y como ponerlo.
- ¿Entonces no crees en los milagros?
- No.
- ¿No crees que la madre de Jesús era virgen?
- No.
- ¿y como explicas cosas tan enrevesadas como la Trinidad?
- Pues me gustó como me lo explico un cura de la comunidad, es como tres personas bailando en corro dados de la mano. - Aquí me di cuenta de que a mi amiga le habían lavado el cerebro, que lástima.
- Entonces, si le quitas todo lo sobrenatural ¿no te quedas simplemente con un hombre corriente del que te gusta su ideología?
- No, yo creo que Jesús era hijo de Dios y que resucitó para salvarnos de nuestros pecados y que Dios le envió por amor.
-¿y como puedes saber eso?
- Pues por los evangelios.

- ¿No habíamos quedado en que los evangelios no son de fiar?
- Pero yo se que es así.
- ¿Y como lo sabes?
- porque yo lo siento así.
- ¿que?
- pues porque sí... porque hay cosas que siento que no puedo explicar, el amor a mis amigos, a mi madre, mi deseo de ayudar a los demás...
- ¿y eso que tiene que ver con Dios?
- Pues es un sentimiento tan fuerte que no puede ser solo humano.
- ¡¿y por qué no puede ser solo humano?! ¿tiene algo de malo que sea una capacidad emergente de la actividad de un cerebro evolutivamente complejo? ¿le quita eso algo de su valor? ¿lo hace menos hermoso y valioso? ¿dejaríamos de querernos si lo pudiésemos explicar?
- Yo se que no puede ser solo humano.
- ¿solo porque no lo puedes explicar? antes no se explicaban los rayos y eran obra de Zeus, no se explicaban los huracanes y los enviaba Quetzalcoatl, no se explicaban las formas de vida en la tierra y fue Dios en siete días - (que quede claro que ella sí cree en la evolución y la selección natural)
- Pero yo lo siento así.
- Bueno, al menos reconocerás que crees en Dios porque te da la gana, no tienes ningún argumento, has decidido que el amor no se puede explicar sin Dios y has rechazado de antemano cualquier otra explicación. De hecho es la única cosa que has decidido que no se puede explicar sin Dios.
- Pues sí, es lo que siento.- (Ante ese argumento tan pobre ¿que te queda?) Decidí ir a la raiz del asunto.
- Entonces para ti Dios es eterno, omnipotente, bueno, y creo el mundo y a todos nosotros, ha estado toda una eternidad solo, en el vacío, y un buen día decidió crear el universo y a las personas ¿por que? ¿para que tenga alguien que le adore? ¿para entretenerse viendo si somos buenos o malos? ¿para mandarnos leyes, enviarnos a su hijo para que muera por nosotros, amenazarnos con el infierno o premiarnos con el cielo? ¿por qué nos crea Dios?
- Por amor...


Llegados a este punto me di cuenta de que mi amiga era un caso perdido, que tenía una increíble necesidad de creer, una necesidad que me resulta tan incomprensible como la que siente un heroinómano o un fumador compulsivo por la nicotina... algo totalmente irracional, capaz de responder cualquier cuestión con una frase vacía aprendida de memoria. Por suerte en el caso de mi amiga es una fé bastante "extraoficial", así que no hemos vuelto a hablar del tema.

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